
La mastectomía masculinizante es una cirugía plástica que se realiza para dar un aspecto masculino al pecho de una mujer o, incluso, en hombres que tienen los senos más desarrollados.
En esta cirugía se extirpan las mamas mediante diferentes técnicas, dependiendo de la decisión del cirujano plástico y del tamaño y tipo de mamas de cada persona. En el caso de mamas pequeñas, se puede extirpar la glándula mamaria a través de la areola, dejando una cicatriz alrededor de ella. También se extrae tejido mamario y se puede realizar una liposucción para ajustar el área del pecho. En senos de mayor tamaño, la incisión se puede realizar a través del pliegue inframamario, con la cicatriz debajo del músculo pectoral. Se elimina el exceso de piel y se reposicionan la areola y el pezón.
La cirugía dura entre 1 y 4 horas y tiene los mismos riesgos que cualquier otra cirugía, como sangrado y hematomas.
El alta hospitalaria se produce el mismo día o al día siguiente de la operación. El paciente sale del centro quirúrgico con un vendaje cerrado y una prenda de compresión que deberá utilizar durante un mes. Debería ayudar a acomodar la piel, reducir la hinchazón y prevenir las secreciones. Sólo en algunos casos es necesario el uso de un drenaje para evitar la acumulación de líquido en las mamas, pero éste se retira a los pocos días de la cirugía.
Una buena recuperación de la cirugía depende de un cuidado postoperatorio bien gestionado. No se permite actividad física ni movimientos bruscos de los brazos durante 30 días. El médico prescribe antibióticos y analgésicos para aliviar el dolor, y los vendajes deben realizarse en el consultorio del cirujano dos días después del procedimiento.
La curación puede tardar de uno a dos años y puede requerir la ayuda de láser, cintas de silicona y medicamentos. Es común que la marca sea más roja en los primeros dos meses y luego se aclare con el tiempo.
Ah, una dieta equilibrada también ayuda a tener una recuperación más fluida .